La habitación es amplia, las camas son confortables, tv muy pequeña, baño bien, pero escasos productos de higiene (eramos 3 y nos dejaron 2 sobres de cada y cada sobre no tiene suficiente para una persona, por lo que quedó mas que escaso y más cuando la habitación era triple). El agua caliente sale enseguida y no se enfría fácilmente, eso me gustó. La limpieza buena, todo aseado y sin polvo. El servicio muy muy justito. La recepción se pasa mucho tiempo sola, la persona que la atiende también se encarga de la zona de cafeteria o terraza o de hacer otras gestiones por lo que llegas y muchas veces no hay nadie. El checking correcto pero no tenian disponibilidad de habitaciones y nos guardaron las maletas (fuimos una hora antes de la hora de entrada de habitaciones al hotel porque íbamos a la Warner) y por la noche a la llegada el recepcionista estaba tranquilamente en la terraza comiendose unas cortezas y sin atender la recepción y al entrar más gente oyó el murmullo y salió a atender (eramos como 15 personas esperando a ser atendidas, todos veníamos de la Warner); no nos pidió el dni para darnos habitación, solo con darle nuestro nombre bastó, cosa que no me gustó, ya que debería haberse asegurado pidiendo dni. Las paredes del hotel son de papel de fumar, por lo que se oyen los ruidos de todas las habitaciones, duchas, tv y conversaciones de quienes se alojan y es bastante molesto. El desayuno no es tal...., yo no lo llamaría desayuno, lo llamaría "picar algo"; es bastante escaso y con muy poco surtido. Está todo amontonado en 2 mesas pequeñas y hay que hacer cola para tostar pan (es pan de molde de mercadona) para ponerte café o leche (es una máquina de café como las que ponen en los hospitales o en las empresas) o para ponerte un vaso de zumo (solo 2 clases y una jarra para cada sabor por lo que se acaba con 4 vasos que se pongan) y para coger una loncha de queso o jamón york y hacerte un sandwich (solo tenian eso de fiambre y a la intemperie, sin refrigeración ni nada). Hay una jarra con leche fría en la mesa de enfrente junto a unas cestas con bolleria industrial (magdalenas, croasanes, sobaos y cereales de 2 clases, todo de mercadona) y mermeladas y mantequilla, asi como un bol con una cuchara para que te sirvas cola-cao a tu gusto (la cuchara alguien la habia metido en su leche y luego de nuevo al bol de cola-cao y daba asco verla ahí). Se acababa todo enseguida y había que estar pidiendo constantemente que repusieran leche, zumos, pan, fiambre....y la chica que lo llevaba era bastante seca y parecía no venirle bien que le pidieran las cosas (esta persona era la que atendía también la recepción y hacía otras gestiones). Las camareras de piso dejan los carros en mitad de los pasillos y no los apartan para que pasen los clientes y si te las cruzas no dan ni los buenos días. La única persona española que ví en el hotel fué el recepcionista de la noche.
Solo hicimos una noche. No está mal para hacer una sola noche si vas a la Warner porque está cerca y es barato, pero le sobran 2 estrellas.
Por cierto, si contratas el hotel por internet no tienes aparcamiento en el garage gratuito, esto es solo para reservas directas con el hotel, cosa que me parece fatal, porque yo pago igual que otra persona que haya reservado por otros medios y es una zona bastante concurrida y tuve que dar 2 vueltas para poder aparcar y más cuando llegas de la warner a las 12 de la noche. No volveré a este hotel ni para hacer una noche, no me ha gustado nada. He pagado 126€ por una noche en habitación triple y 2 entradas a la warner (mi hijo no pagaba entrada) y me parece excesivo para lo que he encontrado. Merece denominación de hostal, nada más.