Este hotel es sinónimo de hospitalidad y de servicios de primer nivel. Para hacer que los clientes se sientan como en casa, la propiedad admite mascotas y se ofrecen habitaciones tanto para fumadores como para no fumadores. Después de un ligero desayuno y de una taza de café o té, los huéspedes podrán optar por pasar el día en la gran piscina al aire libre del complejo, donde podrán nadar y tumbarse bajo el sol con una bebida refrescante del snack bar. También pueden explorar los puntos de interés cercanos y, sobre todo, la fantástica playa de arena blanca y aguas cristalinas. Y para poner la guinda a un día estupendo, el restaurante sirve una gran variedad de platos locales e internacionales en un lugar espacioso y elegante.